La solera aislante de doble capa utiliza hormigón celular principalmente como base aislante.

Este material, empleado como solera ligera, nivela los tubos, sirviendo de soporte para la base tradicional, reduciendo tanto el espesor como el peso.

Además, gracias a su estructura discontinua, el hormigón celular mejora significativamente el aislamiento acústico frente al ruido de impacto.